La felicidad del hogar
Nuestros clientes nos han contado todas las peripecias que han tenido que pasar durante la pandemia. Esta época de oficio casero ha servido para entender que el tiempo es muy valioso, que el ahorro de recursos es fundamental y que hay tareas que es mejor dejarlas en manos de profesionales.
“La máquina de lavar vajillas y la lavadora son la felicidad del hogar. Siempre lo he dicho como una broma, pero durante estos meses se convirtió en algo serio cuando me di cuenta de que en realidad la calidad de vida es fundamental para la convivencia sana entre las familias”, nos cuenta otra de nuestras clientas quien nos llamó a pedirnos auxilio porque no solo estaba muy aburrida de tener que pasar largas horas lavando, planchando y arreglando, sino que además notaba que su ropa cada vez salía más deteriorada de la lavadora y de la secadora.
“Necesito usar mi tiempo en otras cosas. Tengo mucho trabajo, quiero pasar rato con mi esposo y mi hijo y no me puedo dedicar a varios de los oficios del hogar. Se que es trabajo de todos y en familia logramos montar una dinámica buena de las tareas que debe hacer cada uno en la casa, pero realmente es agotador saber que el tiempo se pasa en estas cosas que uno podría delegar. Además, por obvias razones, es una felicidad saber que cuando uno manda la ropa a la lavandería llega todo bien planchado, doblado y no hay que hacer nada más. Ahora pienso que la felicidad del hogar es la lavandería”, concluye con el mismo humor en el que nos narró su historia de cuarentena.